Es un sistema terapéutico incluido en el grupo de las terapias bioenergéticas y descubierta por el Dr. Edward Bach para poder tratar la personalidad de sus pacientes en vez de centrarse en sus enfermedades. Tiene más de 70 años de historia y una serie de casos clínicos resueltos y publicados avalan su efectividad. La Organización Mundial de la Salud (O.M.S.) en el punto 7 de la declaración de Alma-Ata de 1978, ha incorporado las esencias florales como medicinas complementarias y recomienda su uso a los estados miembros.
Los efectos de un tratamiento con Esencias Florales suelen ser sorprendentes y empiezan a sentirse a los pocos días de su comienzo, e incluso en algunos casos se sienten ya a las pocas horas, siendo casi siempre definitivos.
Candidato óptimo para ingerir las Esencias lo es cualquier persona desde los 0 años hasta los 99, o sea, desde los recién nacidos hasta los ancianos. También se obtienen espléndidos resultados con las plantas y con los animales.
Los efectos de un tratamiento con Esencias Florales suelen ser sorprendentes y empiezan a sentirse a los pocos días de su comienzo, e incluso en algunos casos se sienten ya a las pocas horas, siendo casi siempre definitivos.
Candidato óptimo para ingerir las Esencias lo es cualquier persona desde los 0 años hasta los 99, o sea, desde los recién nacidos hasta los ancianos. También se obtienen espléndidos resultados con las plantas y con los animales.
LAS ESENCIAS FLORALES
Si llevamos a cabo las enseñanzas del Dr. Bach y dirigimos la curación centrándonos en el tratamiento de nuestra personalidad, entonces habremos entendido un revelador mensaje, y a través de los cambios y de las transmutaciones en nuestros pensamientos, sentimientos y actitudes, estaremos aprendiendo grandes lecciones. Recordad: “la salud es el cúmulo de información bien asimilada, o sea, el cúmulo de lecciones aprendidas”. Si aprendemos aceptamos, si aceptamos no hay bloqueos, si no hay bloqueos la energía fluye y si la energía fluye hay salud.
Las Esencias Florales actúan con suavidad y son total y absolutamente seguras e inocuas. Pueden ser utilizadas solas o como complemento de otros tratamientos naturales o alopáticos. Carecen de efectos secundarios y actúan aportando a las personas que las ingieren la esencia vital de cada una de las flores. En el momento en el que se unen los dos campos energéticos: el de la flor con el de una persona que padece desarmonías, o con el de cualquier otro ser vivo, inmediatamente comienza a armonizarlo de una forma muy sutil. Su trabajo consiste en equilibrar a la persona produciendo una alineación entre los 3 cuerpos de los cuales se forma: cuerpo físico, cuerpo psicológico, cuerpo emocional o cuerpo espiritual (alma).
El sistema terapéutico del Dr. Bach está formado por 38 flores más un remedio de urgencia todas ellas con propiedades terapéuticas y curativas, para producir en el paciente el equilibrio y la alineación de sus tres cuerpos y así, ser capaz, de descubrir adentro de sí mismo los motivos reales que causan su padecimiento. Bach ordenó todos nuestros estados emocionales en 7 grupos diferentes, pensando en:
Las Esencias Florales actúan con suavidad y son total y absolutamente seguras e inocuas. Pueden ser utilizadas solas o como complemento de otros tratamientos naturales o alopáticos. Carecen de efectos secundarios y actúan aportando a las personas que las ingieren la esencia vital de cada una de las flores. En el momento en el que se unen los dos campos energéticos: el de la flor con el de una persona que padece desarmonías, o con el de cualquier otro ser vivo, inmediatamente comienza a armonizarlo de una forma muy sutil. Su trabajo consiste en equilibrar a la persona produciendo una alineación entre los 3 cuerpos de los cuales se forma: cuerpo físico, cuerpo psicológico, cuerpo emocional o cuerpo espiritual (alma).
El sistema terapéutico del Dr. Bach está formado por 38 flores más un remedio de urgencia todas ellas con propiedades terapéuticas y curativas, para producir en el paciente el equilibrio y la alineación de sus tres cuerpos y así, ser capaz, de descubrir adentro de sí mismo los motivos reales que causan su padecimiento. Bach ordenó todos nuestros estados emocionales en 7 grupos diferentes, pensando en:
el miedo
la incertidumbre
el desinterés por lo actual
la soledad
la hipersensibilidad
la desesperación y el abatimiento
la excesiva preocupación por los demás
LAS ESENCIAS FLORALES-CONTENIDO
Miedos vagos y desconocidos sobre los que el paciente no puede dar ninguna razón ni explicación.
Miedo a que la mente se descontrole, a perder la razón y cometer actos tremendos y terribles, involuntarios y que saben condenables, pero que aún así surge la idea y el impulso de cometerlos.
Para los miedos a las cosas terrenales, como enfermedades, dolor, accidentes, pobreza, oscuridad, soledad, desgracias; en resumen, los temores de la vida cotidiana.
El remedio ideal para aquellos que encuentran difícildejar de angustiarse o inquietarse por otras personas; en muchos casos llegan incluso a dejar de preocuparse por ellos mismos, pero sufren mucho por quienes sienten afecto, augurando constantemente que algo desafortunado o desgraciado puede sucederles.
Es el remedio indicado para emergencias, accidentes, ataques o enfermedades repentinas, especialmente en casos desesperados, cuando el paciente se encuentra muy asustado o aterrorizado, o si la situación es suficientemente grave como para atemorizar a quienes lo acompaña. Si el paciente no está consciente, puede administrársele humedeciéndole los labios.
GRUPO 2: La incertidumbre
Para aquellos que no tienen suficiente confianza en sí mismos como para tomar sus propias decisiones; constantemente piden consejo a los demás y, con frecuencia, resultan mal orientados.
Para quienes se desalientan fácilmente; pueden estar recuperándose de una enfermedad, o progresando satisfactoriamente en distintas facetas de su vida cotidiana, pero cualquier demora o impedimento en ese progreso, por pequeño que sea, los hace dudar, se desalientan y descorazonan fácilmente.
En el colmo de la desesperanza, han renunciado a creer que se puede hacer algo más por ellos. Bajo la persuasión de otros - o para complacerlos - quizás intenten distintos tratamientos, pero al mismo tiempo seguirán asegurando a los que los rodean que tienen muy pocas esperanzas de aliviarse.
Para aquellos que sienten que no tienen suficiente fuerza mental o física para soportar la carga de la vida. Los asuntos cotidianos les parecen demasiado pesados para llevarlos a cabo, aunque generalmente cumplen con éxito sus tareas. Es el remedio indicado para quienes creen que necesitan fortalecer alguna parte de la mente o del cuerpo para poder terminar con mayor facilidad su trabajo.
Para aquellos que sufren mucho por su incapacidad para decidir entre dos cosas, inclinándose alternativamente por una y por otra. Por lo general, son personas calladas que soportan solas sus dificultades, porque no siempre se sienten inclinadas a comentarlas con los demás.
El remedio indicado para quienes ambicionan hacer algo importante en la vida; que desean adquirir experiencia, disfrutar todo lo que les sea posible y vivir intensamente la vida. Su dificultad consiste en llegar a determinar a qué ocupación se van a dedicar, pues si bien sus ambiciones son fuertes, no tienen una vocación definida, hecho que suele ocasionarles demoras e insatisfacciones.
GRUPO 3: El desinterés por lo actual
Para aquellos que no aprovechan totalmente la observación y las experiencias, o necesitan más tiempo que los demás para asimilar las enseñanzas de la vida cotidiana. Mientras que para algunos una sola experiencia es suficiente, estas personas sienten la necesidad de repetirlas varias veces antes de aprender la lección. Por lo tanto, y muy a pesar suyo, se ven repitiendo el mismo error en distintas ocasiones, sin advertir que una sola vez debería haber sido suficiente, o que las observaciones de los demás tendrían que haber bastado para evitarles el error.
Recomendado especialmente para los soñadores, los somnolientos, los que no están plenamente conscientes, o que no tienen gran interés por su vida presente. Personas generalmente calladas, que no son realmente felices en sus circunstancias actuales, y que piensan más en el futuro que en el presente; viven esperanzados en tiempos mejores, en los que sus ideales puedan concretarse plenamente. Cuando enferman, algunos hacen poco o ningún esfuerzo por mejorarse, y en ciertos casos pueden incluso desear la muerte, con la esperanza de reencontrarse con algún ser querido que ha perdido.
Para los que viven demasiado en el pasado - añorando quizás épocas de gran felicidad - recordando a un amigo perdido o ciertas ambiciones que no llegaron a concretarse. No esperan que ninguna felicidad futura pueda parecerse a aquella que tuvieron.
Para las personas propensas a sufrir períodos de melancolía o aún de desesperación, sintiendo como si una fría nube negra les eclipsara y les ocultara la luz y la alegría de vivir. Además, muchas veces les resulta difícil encontrar una razón o explicación para esos estados repentinos. Bajo estas condiciones, es prácticamente imposible mostrarse feliz o alegre.
Para quienes han sufrido mucho física y mentalmente, y se encuentran tan fatigados y exhaustos que sienten que ya no tienen fuerzas para realizar ningún esfuerzo más. La vida cotidiana representa un árduo trabajo y no les brinda ningún placer.
Ideal para aquellos que no pueden evitar que su mente se vea invadida por pensamientos, ideas y argumentos que no desean, sobre todo en esos momentos en que el interés por las circunstancias coyunturales no es lo suficientemente fuerte como para mantener la mente a pleno. El remedio suele aliviar esos pensamientos que los preocupan, y que persistirán, o que retomarán si logran alejarlos temporalmente; son los mismos pensamientos que parecen dar vueltas y vueltas, rodeándolos y causándoles una verdadera tortura mental. La presencia de esos pensamientos desagradables les quitan la paz e interfieren con su capacidad de pensar solamente en su trabajo y los placeres cotidianos.
Para todos los que sin ninguna razón aparente se ha resignado a todo lo que les sucede, y sólo se deslizan por la vida sin hacer esfuerzo alguno por modificar las cosas y encontrar un poco de felicidad. Sin quejarse, se han rendido en la lucha por la vida.
GRUPO 4: La soledad
Para aquellos que siempre están buscando la compañía de alguien que se encuentre disponible para hablarles, dado que necesitan imprescindiblemente discutir con otros sus propios asuntos, sin importar de quién se trate. Se sienten muy infelices si tienen que estar solos, sea por el tiempo que sea.
El remedio indicado para las personas rápidas para pensar y actuar, o que desean que todas las cosas se hagan sin vacilación ni demora; por ejemplo, los que se sienten ansiosos de una pronta recuperación de una enfermedad.
Para quienes gustan de estar solos, tanto cuando están sanos como cuando están enfermos. Son por lo general personas tranquilas y serenas, que se mueven sin hacer ruido, y que hablan poco y con amabilidad. Son muy independientes, capaces y seguros de sí mismos; casi indiferentes a las opiniones de los demás, se mantienen distantes y se apartan de los que los rodean, eligiendo su propio camino. Con frecuencia son inteligentes y talentosos, y su paz y serenidad son una bendición para sus allegados.
GRUPO 5: La hipersensibilidad
Para personas joviales, alegres, bromistas, que aman la paz y se angustian con las discusiones o disputas, para evitar las cuales consentirán en renunciar a muchas cosas. Aunque generalmente tienen problemas y se sienten atormentados, inquietos y preocupados, tanto física como mentalmente, lo ocultan detrás de sus chistes y sus bromas, por lo que son muy apreciados en sus círculos de amistades. Con frecuencia, tienden a los excesos en el alcohol o las drogas, para estimularse y ayudarse a sobrellevar con alegría sus preocupaciones.
Indicada para gente bondadosa, callada y dócil, que se encuentra hiperansiosa por servir a los demás, pero sobrevaloran sus fuerzas para esa tarea. A pesar de ello, se sienten involucrados a tal extremo que se convierten más en sirvientes que en ayudantes voluntarios. Su afán de servicio los lleva a realizar más trabajo del que les corresponde, a tal punto que pueden llegar a descuidar su propia misión en la vida.
Para aquellos que en ciertas ocasiones se sienten asaltados por emociones conflictivas, tales como celos, envidia, venganza, sospechas, etc., o padecen distintas formas de vejación. Con frecuencia, suelen sufrir mucho internamente, aunque no exista una causa real que justifique sus padecimientos.
Para quienes tienen claramente definidos sus ideales y ambiciones en la vida, y las concretan, pero en algunas ocasiones excepcionales se sienten tentados de apartarse de sus propias ideas, propósitos y trabajo, influidos por el entusiasmo, las convicciones y la firmeza de ciertas opiniones ajenas. El remedio les proporciona la perseverancia necesaria, y les aporta protección contra las influencias externas.
GRUPO 6: La desesperación y el abatimiento
Es el remedio de la purificación, y puede aplicarse a todos aquellos que sienten como si en ellos existiese algo que no está del todo limpio. Con frecuencia son cosas que parecen tener poca relevancia, pero en algunos casos pueden desencadenar algunas enfermedades muy graves, al desarrollo de las cuales casi no prestan atención, absorbidos por el tema o el hecho sobre el cual están concentrados.
Para quienes no se consideran a sí mismos tan aptos y capaces como los que los rodean; esperan el fracaso y sienten que nunca tendrán éxito, por lo que no se arriesgan ni hacen un esfuerzo suficientemente intenso para lograrlo.
Para aquellos que se están desempeñando bien, siguen el llamado de su vocación y esperan hacer algo importante – con frecuencia en beneficio de la humanidad -, pero que en ocasiones suelen pasar por períodos de depresión, cuando sienten que la tarea que han emprendido es demasiado difícil y no se encuentra dentro de las posibilidades materiales de un ser humano.
Para aquellos que se esfuerzan y luchan con firmeza, sea por su bienestar o en relación con los asuntos de su vida cotidiana, y continúan intentando una cosa tras otra, aunque su caso parezca desesperado. Seguirán luchando, pero se sentirán descontentos consigo mismos si la enfermedad interfiere en sus obligaciones o en su vocación por ayudar a los demás.
Para los que se culpan a sí mismo, y aún cuando tienen éxito en sus emprendimientos, piensan que podrían haberlo hecho mejor. Jamás se encuentran satisfechos con sus esfuerzos ni con los resultados; son trabajadores tenaces, pero sufren mucho por los defectos que se autoadjudican. Bajo ciertas circunstancias, aún cuando el error se deba a alguna intervención ajena, se sentirán personalmente responsables de cualquier error que pudiera haberse cometido.
Para quienes se sienten angustiados por haber vivido situaciones que durante cierto tiempo los sumieron en una gran nfelicidad, como el impacto provocado por noticias muy graves, la pérdida de un ser querido, el temor que sigue a un accidente y otras conmociones semejantes. Este remedio también aporta alivio a quienes por un tiempo rechazan el consuelo de sus allegados.
Indicado para esos momentos que atraviesan algunas personas en quienes la angustia es tan grande que les resulta insoportable. Momentos en que la mente o el cuerpo sienten como si hubiesen llegado al límite extremo de su resistencia, y parece que lo único que les queda por enfrentar es el aniquilamiento y la destrucción.
Para las personas que han sufrido adversidades o infortunios, y les resulta difícil aceptarlos sin quejas o resentimiento, ya que con preferencia juzgan a la vida por el éxito que les brinda. Sienten que ellos no merecen una prueba tan grande porque es injusta, y eso los convierte en seres amargados y resentido. Con frecuencia pierden el interés con respecto a las cosas de la vida que antes disfrutaban, y se vuelven apáticos y menos activos.
Para aquellos que sienten la necesidad de ver más bondad y belleza en todo lo que los rodea, y aunque muchas cosas parezcan estar mal, tienen la virtud de ver el bien creciendo en su interior.
Para aquellos que se preocupan demasiado por las necesidades de los demás, y tienden a excederse de sus cuidados a los niños, familiares y amigos, encontrando siempre algo que debe ser corregido. Disfrutan intentando modificar todo lo que consideran que está mal, y anhelan tener siempre cerca a aquellos por quienes se preocupan.
Para los que son demasiado estrictos en su modo de vivir, y se niegan a sí mismos muchas de las alegrías y placeres de la vida, porque consideran que van a interferir en su trabajo. Por lo general, resultan amos muy severos para consigo mismos; desean estar bien, fuertes y activos, y harán cualquier cosa para poder mantenerse así. Esperan ser ejemplos que atraigan a otros a seguir sus ideas para obtener mejores resultados.
Para quienes tienen principios e ideas fijas, y por estar seguros de que son las correctas, rara vez modifican su actitud. Desean fervientemente convertir a quienes los rodean a sus propios puntos de vista con respecto a la vida.
Para personas muy capaces, seguras de su propio talento y confiadas en el éxito. Su seguridad en sí mismos los hace pensar que a los demás los beneficiaría dejarse convencer por su prédica y hacer las cosas tal como ellos las hacen. Incluso durante la enfermedad dirigen a quienes los atienden, y suelen ser de gran utilidad en situaciones de emergencia.
DR. EDWAR BACH - Bach por Bach Obras Completas - Edi. Continente
********************
Este medicamento es un compuesto de cinco flores: Cherry Plum, Clematis, Impatiens, Rock Rose y Star of Bethlehem. Es el remedio de urgencia del Sistema Bach.
Chancellor describe en su libro sobre los Remedios Florales, la primera vez que Bach tuvo ocasión de usar el Rescue Remedy, en 1930, cuando su fórmula estaba compuesta solamente por el Rock Rose, el Clematis y el Impatiens, ya que aún no había descubierto los otros dos remedios. Durante una fuerte tormenta, un pequeño bote cargado de tejas naufragó en las costa de Cromer, donde Bach vivía en esa época. La tripulación, compuesta de dos hombres, se había amarrado al mástil para evitar ser arrastrados por las olas y caer al mar desde el barco que se estaba hundiendo. Debido al mar embravecido debieron esperar muchas horas sumergidos en el agua hasta que el bote salvavidas pudo rescatarlos. Cuando lo hicieron, el hombre más joven estaba inconsciente, su cara azul y sus ropas endurecidas por la sal de mar. Bach corrió a través de la rompiente hacia el bote salvavidas, humedeció los labios del náufrago con Rescue Remedy y continuó dándoselo mientras el hombre era llevado desde la playa hacia un hotel cercano. Antes de llegar al hotel, el hombre recobró el conocimiento y cuando llegó allí, pidió fumar un cigarrillo.
Esta anécdota de la vida de Bach nos es útil para entender el uso del Rescue Remedy. Efectivamente, es el remedio de urgencia, para todo tipo de shock o estrés agudo tanto físico como psíquico.
El shock posterior a un accidente, esté el sujeto en estado de inconsciencia o no; antes y después de una intervención quirúrgica o un acto odontológico; la angustia que puede sobrevenir al recibir una mala noticia; antes, durante y después de un parto, crisis de hipotensión e hipertensión aguda; período agudo de duelo; son algunas de las muchas situaciones que pueden requerir el uso del Rescue Remedy.
DRA. MARIA LUISA PASTORINO – La medicina Floral de Edward Bach – Edi. Urano









































No hay comentarios:
Publicar un comentario